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jueves, 13 de noviembre de 2014

Una experiencia más

Hace unas semanas una expedición de mandos y cadetes partió rumbo a Toledo, en concreto, a Navamorcuende al Camping el Piélago, para asistir encuentro de responsables educativos de la O.J.E. a nivel nacional.

Tomamos como punto de partida la Plaza de las Cortés para reunirnos antes de salir y cuando estuvimos todos, montamos en nuestros coches que nos llevaría al lugar esperado. Antes de este viernes, que fue el día en el que a las 21:00 partimos, el miércoles y el jueves estuvimos preparando todo lo que nos hacía falta para poder mostrar a los demás compañeros cómo trabajamos en nuestro Hogar, su origen y, entre otras cosas, preparamos nuestra canción «Cambiar el mundo con mis manos», ya que fue el himno oficial del encuentro.

Como he dicho antes, partimos a las 21:00 y, tras hacer dos paradillas antes de llegar al destino, llegamos a las 3:30. Cuando ya estábamos allí casi todo el mundo dormía, por lo que nosotros hicimos lo mismo: descansar para las jornadas intensivas que nos esperaban los días siguientes.

Sábado 1 de Noviembre, a las 9:00 estábamos todos agrupados en nuestros respectivos grupos, casi doscientas personas entre flechas, arqueros, cadetes, dirigentes, jefes de hogar y jefes regionales. Seguidamente, desayunamos todos juntos en el comedor. A las 10:30 tuvo lugar la primera conferencia grupal, en este caso nos explicaron la actividad que año a año se realiza en Cazorla organizada por la O.J.E. de Onil, fue una conferencia muy interesante. Tras esta charla, enseñamos la primera parte de nuestra canción y luego tuvimos actividades en nuestros grupos en las que aprendimos diversas actividades y, por ejemplo, comportamientos que adoptar con nuestros afiliados.

A las 14:30 comimos todos juntos en el comedor y cuando terminamos disfrutamos del tiempo libre que teníamos para poder conocer a otras personas, tocar la guitarra y, sobre todo, dejarnos llevar por lo que estábamos viviendo.

A las 16:00 empezamos las actividades por grupos de nuevo en las que, por ejemplo, los flechas hicieron un lip-dub, los arqueros divertidos juegos, los dirigentes enfocaron su actividad al periodismo ciudadano para valorar la visión exterior de la O.J.E., nuestros compañeros mostraron al grupo de los jefes de hogar con una presentación el origen y la forma de trabajar que tenemos en el Hogar del Guía... En definitiva, fue una tarde de lo más entretenida.

Conforme iba transcurriendo la tarde del sábado, íbamos estando más cansados, pero todo merecía la pena porque este tipo de cosas no se suelen vivir muy a menudo. A las 21:00 cenamos, de nuevo todos juntos en el comedor; tras la cena volvimos a tocar nuestra canción que muchos de los allí presentes conocían ya y con ello dimos paso a la larga velada que nos habían preparado.

Sobre las 00:00 había terminado esa velada y, como siempre, entre guitarras y abrigos, pasamos un buen rato con bastantes personas del encuentro. El cansancio se apoderó de nosotros por completo y nos fuimos a la cama para poder rendir al 100% a la mañana siguiente.

Sonaba la diana a las 8:30 de la mañana para uniformarnos y estar preparados para el acto que iba a tener lugar a las 9:00. Un enorme círculo entonaba el Olarí, olará para izar la bandera de España. Después de este acto, desayunamos y comenzamos más actividades. En esta mañana las actividades iban a ser conjuntas todas o casi todas porque fueron conferencias muy interesantes, sobre otros hogares y sobre la experiencia de un compañero montañero de la O.J.E.; conferencia que, sin duda, nos puso a todos la piel de gallina por todas las aventuras que nos enseño, demostrando siempre el esfuerzo y la superación, algo que tenemos muy presente en nuestro hogar.

Terminaba esta mañana con un piscolabis que nos habían preparado y con la clausura del encuentro con unas palabras de nuestro presidente nacional Juanjo, quién nos pidió que tocáramos la canción por última vez.

Por último, comimos, nos despedimos de nuestros compañeros y emprendimos el camino que nos llevaría de vuelta a casa. A las 21:30 de la noche esta experiencia había terminado.


Y bien, otro viaje más, mil cosas para enseñar, recuerdos imborrables y, como siempre, llevando un lema por bandera: «Rulen, qué Rulen».

Vocalía de Información y Difusión
Hogar del Guía
V.Q.S.


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